Por si fuera poco, el pueblo cuenta con una empresa propia de distribución de energía, algo que no es muy común en en España, donde aparte de las grandes solo hay unos pocos centenares de empresas distribuidoras pequeñas.
Es por eso que el pueblo mira con buenos ojos el hecho de apostar por las energías renovables y desconectarse de la red eléctrica. Y no es ninguna locura ya que los recursos los tiene. De hecho, hay un parque eólico del Grupo ACS en su término municipal, lo que certifica que el recurso renovable es abundante. El pueblo cuenta también con terreno municipal suficiente para albergar un instalación fotovoltaica que complemente al parque, además de recursos ganaderos y forestales para producir energía a partir de bioenergía.
Por último, el pueblo también tiene potencial para el almacenamiento eléctrico ya que está ubicado junto a un pequeño cauce de un río, lo que le permite crear un sistema de dos almacenes de agua a distinta cota.
En cualquier caso, no todo es tan bonito como parece. La inversión necesaria para realizar este tipo de instalaciones no es pequeña, y más aún para un pueblo de estas características. Se estima una inversión de unos 4 millones de euros. Aparte quedaría la dificultad de coordinar todas estas fuentes de energía para que todo funcionase correctamente.
Según declaraciones de su alcalde: "Personalmente, estoy convencido de que será más fácil conseguir la financiación que tener en condiciones la documentación para poder empezar. Con esto último, en dos años como máximo el proyecto estará funcionando".
Imágen | Wikimedia Commons
COMMENTS