Tesla y Panasonic comenzaron con la producción de baterías en la Gigafábrica de Nevada durante el mes pasado. Paralelamente, Tesla sigue adelante con la construcción, para lo cual va requiriendo diferentes permisos que nos dan pistas del estado de las obras.
Debido a nuevos permisos y modificaciones solicitados durante el mes de enero, hemos conocido que la inversión total en la construcción de la Gigafábrica ha superado ya los 1.000 millones de dólares.
Entre los permisos más interesante que ha solicitado Tesla, están la construcción de un laboratorio de microrredes, un depósito de nitrógeno o un tanque de almacenamiento térmico. Un laboratorio que permitirá realizar pruebas con sus productos de almacenamiento y quizá solares, y un sistema de almacenamiento eléctrico que probablemente se encargue de almacenar calor residual, como parte del plan de eficiencia de la Gigafábrica.
Con la adquisición de estos permisos, Tesla ha pagado un total de 5,58 millones de dólares, una cantidad a tener en cuenta para un condado tan pequeño como el de Storey.
Actualmente Tesla se encuentra aumentando la producción celdas de batería en la Gigafábrica, de tal forma que pueda seguir aumentando también su negocio de baterías. Un negocio que según responsables de la empresa está creciendo tan rápido como lo humanamente posible.
La Gigafábrica cuenta ya con 1.000 empleados, a los que habrá que sumarles 550 más para producir los trenes de potencia del Model 3. Para el segundo trimestre, se espera que se comiencen a fabricar celdas para el Model 3.
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Fuente | Electrek
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