Este horizonte llegará impulsado principalmente por energías como la solar y la eólica, y en el que también se incluirán tecnologías de almacenamiento eléctrico para poder compensar su variabilidad. Actualmente la isla ya tiene un parque eólico en funcionamiento, además de otro actualmente en construcción.
Los planes de futuro incluyen la instalación de una planta fotovoltaica de gran tamaño en la zona del aeropuerto, una planta de valorización energética de residuos, instalaciones de autoconsumo sobre tejados de viviendas y edificios comerciales... en definitiva, una gran y diversificada cantidad de proyectos que puedan generar un porcentaje sustancial de las necesidades eléctricas de la isla.
Además, Aruba está investigando fuertemente en otras tecnologías más innovadores como pueden ser el aprovechamiento de la energía térmica de los océanos, la energía geotérmica y las soluciones de almacenamiento eléctrico. Los aerogeneradores offshore flotantes también son una posibilidad que se está barajando.
Según el responsable de energía de Aruba, tiene mucho sentido que las islas se pasen a la energía renovable. Por un lado, porque pagan mayores costes por la generación de electricidad y por el otro porque también son poseedoras de los mejores recursos naturales.
Vía | Cleantechnica
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