Uno de los principales problemas a los que se enfrenta una instalación de placas solares en el tejado de nuestras viviendas es el impacto visual. Algo que les impide por ejemplo, desplegarse con libertad en zonas de especial protección urbanística, como centros históricos.
Para solucionarlo hay en el mercado algunas alternativas de placas solares integradas en tejas. Un sistema poco extendido pero que se muestra como una solución para aquellos que no quieran o no puedan tener los tradicionales paneles solares en su tejado.
Dentro de este mercado hay varios diseños, que van desde la teja tradicional, hasta losetas imitando los tejados de pizarra.
Las tejas solares, están basadas en el desarrollo de nuevos sistemas y materiales, como el silicio amorfo o monocristalino, que permiten a los paneles ser completamente flexibles y por lo tanto, adaptarse a cualquier forma. Es por eso que son casi iguales que una teja convencional, con la propiedad añadida de producir energía solar, libre de contaminación. Una solución que permite mantener incluso los tejados con superficie ondulada.
Otra opción es optar por tejas planas. Un diseño que comprende unidades de 48 cm2, donde encontramos cuatro células solares y se puede instalar de manera convencional, conectándole los paneles solares para crear un campo fotovoltaico.
Si lo que necesitamos es algo más moderno, podemos optar por las tejas transparentes. Una propuesta de la empresa sueca SolTech Energy destinada a labores térmicas. Estas tejas están fabricadas con vidrio ordinario y pesan lo mismo que las tejas de barro. Las tejas son instaladas sobre un lienzo negro en donde están montados los espacios de aire, un aire que se calienta con la radiación solar. El color negro absorbe el calor y por lo tanto el aire que circula por debajo.
Este aire luego se utiliza para calentar agua o directamente una habitación y según el fabricante es capaz de producir unos 350 kWh de calor por metro cuadrado.
Un sistema el de placas solares en las tejas que ya están utilizando con éxito ciudades como la italiana de Florencia. Un lugar especialmente preocupado por la apariencia de sus casas en un entorno histórico y patrimonio de la humanidad.
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