Según BMW, las ventas en esta primera mitad de año se han disparado por encima de las expectativas, sobre todo en aquellos países donde este tipo de vehículos cuentan con un ayudas del gobierno, y una amplia red de recarga pública.
Como ejemplo BMW indica que durante el pasado mes de julio el 43% de los Serie 3 vendidos en Holanda han correspondido a la versión enchufable. Siguiendo en Holanda, el 26% de las matriculaciones del nuevo Serie 2 Active Tourer han correspondido a la variante híbrida enchufable.
Algo parecido se puede extender a los mercados del norte de Europa. En la región escandinava la versión enchufable del Serie 3 acumula un 45% del total de las ventas, mientras que el Active tourer llega al 55%.
Según el responsable de ventas y marketing de BMW, Ian Robertson: "Mientras vemos el crecimiento en toda nuestra gama, la realidad es que la producción planificada para las versiones electrificadas de los Serie 7, Serie 3, y Serie 2 Aactive Tourer, tienen toda su producción comprometida para este año. Algo que demuestra que nuestra estrategia de despliegue de la electrificación en todos los modelos es la correcta. Nosotros, por supuesto, ahora debemos responder a esta alta demanda de los clientes".
Las razones para este éxito de ventas radica principalmente en un mejor marco legislativo para la tecnología. En Holanda este tipo de vehículos disfrutan de una carga impositiva menor que sus versiones convencionales, lo que hace que sus precios sean casi iguales. Algo parecido sucede en los países escandinavos, que aplican rebajas impositivas.
A esto se añade una buena red de recarga, y un elevado poder adquisitivo. Todo esto da como resultado una cuota de penetración de los modelos enchufables muy por encima de la media en el resto del continente.
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Fuente | BMW
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