La instalación cuenta con tres generadores diesel de 222 kW, un aerogenerador G52-850 kW, 816 módulos fotovoltaicos (245 kWp) e incorporará en verano baterías con capacidad del almacenamiento de 500 kWh, conjunto que alcanza una potencia de 2MW. Además, el prototipo incluye un software de control desarrollado por Gamesa para facilitar la integración de las tecnologías.
"Lo que realmente nos diferencia de otros competidores es el desarrollo propio del controlador de hibridación de las diferentes tecnologías", destacó Cortajarena. Este proyecto permite además un ahorro económico del 40% frente a los tradicionales equipos de diésel, lo que supone asimismo evitar la emisión de 22.300 toneladas de CO2
Este prototipo ha supuesto una inversión que asciende a los 3 millones de euros. Gracias a esto la empresa eólica se abre camino en la generación en zonas aisladas, segmento de negocio que tiene previsto su crecimiento en los próximos años.
"Lo que realmente nos diferencia de otros competidores es el desarrollo propio del controlador de hibridación de las diferentes tecnologías", destacó Cortajarena. Este proyecto permite además un ahorro económico del 40% frente a los tradicionales equipos de diésel, lo que supone asimismo evitar la emisión de 22.300 toneladas de CO2
Este prototipo ha supuesto una inversión que asciende a los 3 millones de euros. Gracias a esto la empresa eólica se abre camino en la generación en zonas aisladas, segmento de negocio que tiene previsto su crecimiento en los próximos años.
Según David Mesonero, el director general de Desarrollo de Negocio de Gamesa, gracias a esta potencia se podrían generar 500 millones de euros de negocio. Gamesa abrió la puertas a este segmento de negocio en 2015-2017 con la intención de empezar a añadir valor a la empresa eólica a partir de 2018.
Los principales mercados de Gamesa para vender este tipo de instalaciones son islas como Filipinas o Indonesia, o zonas rurales aisladas en Latinoamérica o África, tanto para uso doméstico como también industrial. Para avanzar en el negocio, Gamesa creará prototipos adaptados a las necesidades de cada cliente.
Ignacio Martín, Presidente de Gamesa, ha subrayado: "el desarrollo de este sistema representa un paso más en el objetivo de Gamesa de dar respuesta a las necesidades energéticas de manera sostenible. En la actualidad, más de 1.200 millones de personas carecen de acceso a la electricidad. Áreas rurales de India, el sudeste asiático o África, islas como Haití, Indonesia o Filipinas, y otras zonas remotas del planeta -como selvas o desiertos- podrán beneficiarse de estas aplicaciones ‘offgrid' que permiten generar energía de manera más barata y limpia".
"La entrada de Gamesa en el sector offgrid supone un nuevo reto tecnológico y un potencial nicho de mercado, ya que las perspectivas de desarrollo de esta tecnología rondan los 1.200 MW en los próximos años. La ventaja de nuestro sistema se basa en su flexibilidad para adaptarse de manera personalizada a las necesidades de los clientes, aumentando, reduciendo o suprimiendo la capacidad de cada una de las tecnologías", ha explicado David Mesonero.
Gamesa, cuarto en el ránking mundial de este negocio, ha confiado en esta línea de negocio como una de las vías que permitan a la industria española seguir creciendo.
Fuente | Gamesa
Los principales mercados de Gamesa para vender este tipo de instalaciones son islas como Filipinas o Indonesia, o zonas rurales aisladas en Latinoamérica o África, tanto para uso doméstico como también industrial. Para avanzar en el negocio, Gamesa creará prototipos adaptados a las necesidades de cada cliente.
Ignacio Martín, Presidente de Gamesa, ha subrayado: "el desarrollo de este sistema representa un paso más en el objetivo de Gamesa de dar respuesta a las necesidades energéticas de manera sostenible. En la actualidad, más de 1.200 millones de personas carecen de acceso a la electricidad. Áreas rurales de India, el sudeste asiático o África, islas como Haití, Indonesia o Filipinas, y otras zonas remotas del planeta -como selvas o desiertos- podrán beneficiarse de estas aplicaciones ‘offgrid' que permiten generar energía de manera más barata y limpia".
"La entrada de Gamesa en el sector offgrid supone un nuevo reto tecnológico y un potencial nicho de mercado, ya que las perspectivas de desarrollo de esta tecnología rondan los 1.200 MW en los próximos años. La ventaja de nuestro sistema se basa en su flexibilidad para adaptarse de manera personalizada a las necesidades de los clientes, aumentando, reduciendo o suprimiendo la capacidad de cada una de las tecnologías", ha explicado David Mesonero.
Gamesa, cuarto en el ránking mundial de este negocio, ha confiado en esta línea de negocio como una de las vías que permitan a la industria española seguir creciendo.
Fuente | Gamesa
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